Jack el destripador

Introducción

Jack el Destripador (Jack the Ripper) es, sin duda, el asesino en serie más famoso de la historia. Durante el otoño de 1888, aterrorizó el empobrecido barrio de Whitechapel en el East End de Londres con una serie de brutales asesinatos que conmocionaron a la sociedad victoriana. Su identidad nunca fue descubierta, convirtiéndolo en el enigma criminal más antiguo y fascinante del mundo.
Lo que hace especialmente perturbador este caso no es solo la brutalidad de los crímenes, sino el hecho de que ocurrieron en el corazón del Imperio Británico, la nación más poderosa del mundo en ese momento. A pesar de los esfuerzos de Scotland Yard y la atención mediática sin precedentes, el asesino logró evadir la captura y desaparecer en las sombras de las calles londinenses.
Más de 136 años después, su caso sigue generando teorías, investigaciones y debates. En 2025, nuevas pruebas de ADN han reavivado la controversia sobre su posible identidad, aunque la comunidad científica permanece dividida.

¿Que hizo Jack el destripador?

Entre agosto y noviembre de 1888, Jack el Destripador asesinó brutalmente a al menos cinco mujeres en Whitechapel, todas ellas trabajadoras sexuales que vivían en extrema pobreza. Su modus operandi era metódico y aterrador:
1. Seleccionaba a prostitutas solitarias en las oscuras callejuelas de Whitechapel
2. Las asesinaba mediante cortes profundos en la garganta
3. Mutilaba sus cuerpos con precisión casi quirúrgica
4. Les abría el abdomen y extraía órganos internos (útero, riñones)
5. Desfiguraba sus rostros en algunos casos
6. Abandonaba los cuerpos en lugares públicos pero oscuros

Características distintivas:
• Los asesinatos ocurrían por la noche, generalmente durante fines de semana
• Cada crimen era más brutal que el anterior
• Las mutilaciones sugerían conocimientos de anatomía
• El asesino trabajaba con extraordinaria rapidez (algunos asesinatos duraron apenas minutos)
• Nunca dejaba testigos ni evidencia forense útil

El caso permanece oficialmente sin resolver, aunque ha habido cientos de teorías y sospechosos a lo largo de más de un siglo.

El Contexto: Whitechapel en 1888
Para entender los crímenes de Jack el Destripador, es fundamental comprender el contexto del East End victoriano.
Un Barrio Sumido en la Miseria
A finales del siglo XIX, Whitechapel era uno de los barrios más pobres y peligrosos de Londres. La zona estaba superpoblada debido a:

  • La llegada masiva de inmigrantes irlandeses
  • Refugiados judíos del este de Europa y Rusia imperial desde 1882
  • Desempleo masivo y condiciones de vida deplorables
  • Según estimaciones de la Policía Metropolitana de Londres, en octubre de 1888 había 62 burdeles y aproximadamente 1,200 prostitutas trabajando en Whitechapel. La prostitución era a menudo la única forma de supervivencia para mujeres sin recursos.

Mary Ann “Polly” Nichols – 31 de agosto de 1888

Perfil: 43 años, madre de cinco hijos, alcohólica. Vivía en casas de huéspedes y se prostituía ocasionalmente.
El Crimen: Su cuerpo fue encontrado a las 3:40 AM en Buck’s Row (actual Durward Street) por Charles Cross, un chofer. Tenía:
• Dos cortes profundos en la garganta
• El abdomen rasgado con una hendidura en zigzag
• Varias incisiones hechas con el mismo cuchillo
Este fue el primer asesinato “canónico” y estableció el patrón que seguiría el Destripador.

Annie Chapman – 8 de septiembre de 1888

Perfil: 47 años, viuda, había perdido a sus hijos. También luchaba contra el alcoholismo.
El Crimen: Encontrada a las 6 AM en el patio trasero del 29 de Hanbury Street. El cuadro fue aún más truculento:
• Garganta cortada profundamente, casi decapitada
• Abdomen completamente abierto
• Intestinos extraídos y colocados sobre su hombro
• El útero había sido extraído con precisión
El asesinato de Chapman causó pánico masivo. La policía se dio cuenta de que un asesino en serie estaba suelto.
Elizabeth “Long Liz” Stride – 30 de septiembre de 1888
Perfil: 44 años, inmigrante sueca, viuda. Había sido propietaria de un café.
El Crimen: Encontrada a la 1:00 AM en Dutfield’s Yard. A diferencia de las otras:
• Solo tenía un corte profundo en la garganta
• No presentaba mutilaciones abdominales
• Se cree que el asesino fue interrumpido antes de completar su ritual
Este fue parte de la “doble muerte” de esa noche.

Elizabeth «Long Liz» Stride – 30 de septiembre de 1888

Perfil: 44 años, inmigrante sueca, viuda. Había sido propietaria de un café.

El Crimen: Encontrada a la 1:00 AM en Dutfield’s Yard. A diferencia de las otras:

  • Solo tenía un corte profundo en la garganta
  • No presentaba mutilaciones abdominales
  • Se cree que el asesino fue interrumpido antes de completar su ritual

Este fue parte de la «doble muerte» de esa noche.

Catherine Eddowes – 30 de septiembre de 1888

Perfil: 46 años, había perdido a sus padres en la adolescencia. Vivía en extrema pobreza.

El Crimen: Encontrada a la 1:45 AM en Mitre Square, apenas 45 minutos después del asesinato de Stride y a menos de 1 km de distancia. Las mutilaciones fueron extremas:

  • Garganta cortada
  • Abdomen completamente destripado
  • Rostro severamente desfigurado con cortes
  • Útero y riñón izquierdo extraídos
  • Orejas mutiladas

Detalle escalofriante: Cerca del cuerpo se encontró un mensaje escrito con tiza en una pared: «The Juwes are the men that will not be blamed for nothing» (Los judíos son los hombres que no serán culpados de nada). La policía lo borró para evitar disturbios antisemitas.

Mary Jane Kelly – 9 de noviembre de 1888

Perfil: 25 años, la más joven de las víctimas. Era irlandesa, pelirroja, de ojos azules. A diferencia de las otras, alquilaba una habitación propia.

El Crimen: Encontrada a las 10:45 AM en su habitación del 13 Miller’s Court. Fue el asesinato más brutal:

  • Este fue el único cometido en interior
  • El cuerpo estaba completamente destrozado en la cama
  • Había sido desollada y desmembrada metódicamente
  • Órganos internos extraídos y dispersos por la habitación
  • Rostro mutilado hasta quedar irreconocible
  • El corazón fue extraído y nunca se encontró

Este fue el último de los asesinatos canónicos. Después de Kelly, los crímenes cesaron abruptamente.

Entre septiembre y noviembre de 1888, Scotland Yard y varios periódicos recibieron cientos de cartas supuestamente escritas por el asesino. Aunque la mayoría eran falsas, dos o tres son consideradas posiblemente auténticas.

La Carta «Dear Boss» – 27 de septiembre de 1888

Enviada a la Central News Agency antes de los asesinatos de Stride y Eddowes. En ella, el autor:

  • Se burla de la policía
  • Promete más asesinatos
  • Firma por primera vez como «Jack the Ripper» (Jack el Destripador)

Esta carta popularizó el apodo que usamos hasta hoy.

La Carta «From Hell» – 16 de octubre de 1888

Enviada a George Lusk, presidente del Comité de Vigilancia de Whitechapel. La carta venía acompañada de medio riñón humano preservado. El autor afirmaba haber «freído y comido» la otra mitad.
Análisis médicos posteriores confirmaron que el riñón era humano y compatible con el que le faltaba a Catherine Eddowes.

Scotland Yard desplegó recursos sin precedentes para capturar al Destripador:

  • Más de 2,000 personas fueron entrevistadas
  • Cerca de 300 sospechosos fueron investigados
  • Se usaron perros rastreadores (sin éxito)
  • Se ofreció una recompensa
  • Se formaron comités de vigilancia ciudadana

Sin embargo, el asesino siempre estuvo un paso adelante. Nunca dejó testigos útiles ni evidencia forense que pudiera ser analizada con la tecnología de la época.

A lo largo de más de un siglo, se han propuesto cientos de teorías sobre la identidad del Destripador. Estos son los sospechosos más destacados:

Aaron Kosminski (El Sospechoso Más Reciente – 2024-2025)

Perfil: Barbero polaco de 23 años, inmigrante judío que vivía en Whitechapel.

Evidencia:

  • En 2014, el investigador Russell Edwards adquirió un chal supuestamente encontrado junto al cuerpo de Catherine Eddowes
  • Pruebas de ADN mitocondrial realizadas en 2019 mostraron coincidencias del 99.2% con descendientes de Kosminski
  • Los informes policiales de 1894 (Memorando de Macnaghten) lo identificaban como sospechoso principal
  • Tenía «gran odio hacia las mujeres, especialmente de la clase prostituta»
  • Fue internado en el manicomio de Colney Hatch en 1891 por amenazar a su hermana con un cuchillo
  • Padecía esquizofrenia paranoide, alucinaciones, y rechazaba la higiene personal
  • Murió en 1919 en el asilo de Leavesden

Controversia (2025): En febrero de 2025, Edwards presentó una reconstrucción facial digital de Kosminski y renovó su afirmación de que el caso está resuelto. Sin embargo:
Los descendientes de las víctimas han solicitado una investigación oficial, pero las autoridades no han reabierto el caso formalmente
Muchos expertos cuestionan la validez del ADN mitocondrial (solo puede excluir, no confirmar identidad)
Se sospecha que el chal pudo haber sido contaminado a lo largo de 136 años
La autenticidad del chal como evidencia real del crimen es debatida

Montague John Druitt

Perfil: Abogado de 31 años, profesor, de clase alta.

Evidencia:

  • El inspector Melville Macnaghten lo consideró sospechoso principal
  • Era homosexual (considerado «sexualmente enfermo» en esa época)
  • Se suicidó en diciembre de 1888, un mes después del último asesinato
  • Su cuerpo fue encontrado en el Támesis

En contra:

  • El inspector Frederick Abberline dijo que no había pruebas contra él
  • No hay conexión directa con Whitechapel

Walter Sickert

Perfil: Pintor impresionista de 28 años.

Evidencia:

  • Tenía un «interés desmesurado» en el caso
  • Pintó un cuadro titulado «El dormitorio de Jack el Destripador»
  • En 2014, pruebas de ADN mitocondrial mostraron coincidencias parciales con cartas del Destripador

En contra:

  • Las pruebas de ADN son inconclusas
  • La escritora Patricia Cornwell gastó millones investigándolo, pero no pudo probar su culpabilidad definitivamente

Príncipe Albert Victor (Teoría de la Conspiración Real):

  • Nieto de la Reina Victoria
  • Supuestamente habría tenido un hijo con una prostituta
  • El médico real Sir William Gull habría cometido los asesinatos para silenciar a las testigos
  • Esta teoría ha sido ampliamente desacreditada

«Jill the Ripper» (Teoría de la Asesina Mujer):

  • Sugiere que el asesino pudo haber sido una mujer, posiblemente una partera
  • Explicaría por qué las víctimas confiaban en el asesino
  • Los conocimientos anatómicos encajarían

Después del asesinato de Mary Jane Kelly el 9 de noviembre de 1888, los crímenes característicos del Destripador cesaron abruptamente. Las teorías incluyen:

  1. Muerte del asesino: Pudo haber muerto por enfermedad, suicidio o accidente
  2. Arresto por otro crimen: Pudo haber sido encarcelado por un delito diferente
  3. Internamiento: Pudo haber sido internado en un manicomio
  4. Emigración: Pudo haberse mudado a otra ciudad o país
  5. Satisfacción del impulso: Alcanzó algún objetivo psicológico con Kelly

La realidad es que nunca lo sabremos con certeza.

En la Criminología

El caso del Destripador revolucionó la investigación criminal:

  • Fue uno de los primeros casos en usar fotografía forense
  • Impulsó el desarrollo de técnicas de perfilado criminal
  • Demostró la importancia de la medicina forense
  • Estableció protocolos de investigación de asesinos en serie

En la Cultura Popular

Jack el Destripador ha inspirado:

  • Más de 100 libros de no ficción
  • Cientos de novelas
  • Decenas de películas y series
  • Videojuegos, obras de teatro y musicales
  • Tours turísticos en Londres (el «Ripper Tour» es extremadamente popular)

En la Sociedad Victoriana

Los asesinatos expusieron:

  • La extrema pobreza del East End
  • La explotación de las mujeres más vulnerables
  • Las fallas del sistema policial
  • El sensacionalismo de la prensa

Irónicamente, las víctimas recibieron más atención muertas que vivas.

A finales de 2025, el caso sigue generando controversia. Aunque las pruebas de ADN apuntan a Aaron Kosminski, la comunidad científica permanece dividida:

A favor de Kosminski:

  • Coincidencias de ADN del 99.2%
  • Era sospechoso principal en 1888
  • Su perfil psicológico encaja
  • Fue internado poco después de los crímenes

En contra:

  • El ADN mitocondrial no puede confirmar identidad absoluta
  • El chal pudo estar contaminado
  • No hay pruebas forenses definitivas
  • La autenticidad del chal es cuestionable

Los descendientes de Catherine Eddowes han solicitado una investigación oficial para nombrar formalmente al asesino, pero hasta ahora las autoridades británicas no han tomado acción.

Jack el Destripador sigue siendo el asesino en serie más famoso de la historia, no solo por la brutalidad de sus crímenes, sino por el misterio que lo rodea. Durante más de 136 años, su identidad ha permanecido oculta, convirtiéndolo en una figura casi mítica.
Las cinco mujeres que asesinó —Polly Nichols, Annie Chapman, Elizabeth Stride, Catherine Eddowes y Mary Jane Kelly— eran seres humanos con vidas, familias y esperanzas. La sociedad victoriana las marginó en vida y las explotó en muerte. Como señala la historiadora Hallie Rubenhold: «Jack el Destripador fue una persona real que mató a gente real. No era una leyenda.»
Quizás nunca sepamos con certeza absoluta quién fue Jack el Destripador. Pero lo que sí sabemos es que sus crímenes expusieron las fallas más profundas de la sociedad victoriana y cambiaron para siempre la forma en que investigamos el crimen.
El caso permanece oficialmente sin resolver, un enigma que continúa fascinando y perturbando a nuevas generaciones.